El 21 de junio, a dos días del natalicio de nuestro Fundador, y como un simbólico y providencial regalo de la Ciudad Miliciana para él, comenzaron las obras de construcción del edificio que albergará a una nueva comunidad educativa de Fasta. 

El amor a los jóvenes, a la familia, a la vida comunitaria, a un proyecto de vida bueno; aprendido y heredado del Padre Fosbery moviliza una vez más los corazones y las almas de tantos dispuestos a seguir construyendo nuestro país.

El colegio Fasta Cura Brochero nació de la iniciativa de unos padres de otro de los colegios de Fasta en Córdoba, que teniendo el contacto con la empresa desarrollista Edisur, solicitaron a Fasta pueda extender su propuesta educativa a una nueva zona de la ciudad poniéndola al alcance de nuevas familias. 

El pasado lunes 3 de julio el equipo de gestión, que tiene por responsable del proyecto a la Lic. Eugenia Puccio, recibió a 90 familias interesados en la nueva propuesta educativa para sus hijos y su familia. Durante el encuentro se presentó a los padres qué es Fasta y cuál es su estilo formativo. Acompañaron miembros de Fasta y de Edisur. 

El colegio, que es el número 27 de la Red Educativa, presenta seis rasgos distintivos en su estilo pedagógico a saber: el desarrollo socioafectivo y comunitario, la tecnología educativa, la lengua inglesa, el aire libre y la educación física, la comunicación y la sustentabilidad.

El edificio se está construyendo en Manantiales que es un desarrollo urbano de la empresa Edisur ubicado en la zona suroeste de la Ciudad de Córdoba. Este emprendimiento se caracteriza por ser amigable con el medio ambiente ya que contempla la sustentabilidad como un todo a través del diseño y métodos constructivos. Es por ello que también desde la  propuesta educativa se promueve el cuidado de la casa común.

¿Hasta dónde podemos llegar cuándo hay fervor para hacer algo? Las palabras de nuestro fundador hacen eco en una comunidad de padres que con ardor en el corazón soñaron fundar un nuevo colegio y de una institución que no se fatiga en el empeño de educar evangelizando la cultura, la juventud y las familias a través de un estilo educativo propio.